En este peregrinaje de búsquedas eternas

En este perenigraje de búsquedas eternas,
interminables.
A veces
llegando a algún puerto
aparece la sortija
y un premio condecora tanta espera.
A veces
la espera es demasiado
para tanta alma
y pira,pira,pira...
En medio de estas redondeces,
tantos círculos concéntricos
confunden,ahogan...,ahogan.
Y a veces
en este mismo perenigraje
se arriba a destino
casi
sin darse cuenta.

Esta noche.

Aquí donde la tierra es de nadie
con nadie me he quedado.
Sentada bajo un árbol
pensando estupideces.

Nada
que ya pasa,
es esta constante rutina
nunca aprendida
nunca deseada.

Con las horas va doliendo menos
y el callo va tomando su forma original.

Nada
que ya pasa
ya va pasando.

Hoy duermo bajo el árbol.
Él me dirá que hacer mañana.

Me dejaste sola

Me dejaste sola
por esta calle sin vereda.
Una escarcha sucia me enturbia,
a la espera de un motivo transparente.
Es desconsuelo de una tarde de domingo,
esa antigua soledad
la de siempre.
La de siempre.

Dejé la puerta abierta.

Dejé la puerta abierta como al descuido
para dejarte libre
para dejarme libre
y te fuiste
y me quedé en el iglú
tiritando de frío
llorando
buscando los pedazos
de mi propia vida,
están esparcidos
dentro de esta parcela
lo presiento
pero aún tirito
y la luz tímida de una vela
me acompaña.

VACÍO.

Estoy llena de pérdidas,duelos,historias inconclusas
de vida vivida a medias.
De sartenes sin mango
de cordura loca o locura sana.
Estoy colmada de viajes que no hice
de soles que no vi.
Saturada de amores muertos
de soledad infinita.
de raíces rotas.
Abarrotada de dudas miserables
de riquezas dudosas.
Saturada de oscuridades sórdidas.
Atestada de silencios púrpura.
Estoy llena de vacío.
Y sin embargo
a pesar de todo
por encima de todo
ese vacío
está lleno de esperanza.